Imagínese si usted conduce hasta el estacionamiento y el reconocimiento facial permite su acceso en la entrada principal. Si dirigiendo en el estacionamiento, su teléfono celular lo dirige al lugar de estacionamiento ideal. Entra en el edificio y en cada mesa hay un cargador inalámbrico disponible para sus dispositivos móviles.
Todo esto suena futurista, pero pronto entraremos en ese futuro. Esta tecnología inteligente se está expandiendo nuevamente. La era de Smart Building está sobre nosotros. Sin embargo, esta expansión no debería ser una sorpresa ya que la gente pasa el 87% de su tiempo dentro de los edificios.
“Smart Building” es la creación de estructuras que integran conexiones inalámbricas con sensores para registrar y analizar datos. Estos datos permiten realizar optimizaciones que disminuyen los costos y mejoran la experiencia dentro del entorno local. Por lo tanto, Smart Building beneficia a los propietarios del edificio y a sus ocupantes.
Una serie de industrias ya están utilizando tecnologías inteligentes, incluyendo iluminación, energía, control de temperatura y seguridad.
Algunos ejemplos incluyen sensores que ajustan la temperatura de la habitación en función del número de ocupantes o apagan las luces cuando la habitación está vacía. Si los sensores se conectan al sistema de gestión de energía de todo el edificio, pueden gestionar los recursos de forma más eficiente evitando el desperdicio y adaptándose a la rutina de los ocupantes.
Otro ejemplo es el reconocimiento facial. A través del reconocimiento facial, el tráfico del edificio se hace más fluido y elimina la necesidad de que los guardias de seguridad y los recepcionistas permitan el acceso. La presencia física ya no es necesaria porque hay un estado en tiempo real de la ubicación de todos los ocupantes y los sensores activan advertencias cuando las personas entran en áreas no autorizadas.
Para los propietarios y administradores de edificios, la construcción inteligente proporciona una mayor visibilidad de los costos y el equipo, lo que facilita el mantenimiento preventivo y la optimización presupuestaria.
La infraestructura de Brasil se está volviendo más inteligente, pero todavía hay espacio para mejorar. Brasil ocupa 6 lugares en el ranking de las 165 ciudades más inteligentes del mundo: San Pablo (116), Río de Janeiro (126), Curitiba (135), Brasilia (138), Salvador (147) y Belo Horizonte (151).
Como empresa brasileña, esto es muy emocionante para nosotros y algunos proyectos pueden llevar a algunos a creer que Brasil mejorará en poco tiempo.
Un ejemplo es la ciudad de Armação de Búzios en Río de Janeiro, que utiliza la tecnología para optimizar el consumo y la producción de energía.
Otro ejemplo es la región de Lagoa da Usina, donde el gobierno implementó 60 lámparas LED controladas remotamente. La expectativa es una reducción del 80% en el consumo de energía. El municipio también añadió medidores inteligentes en más de 200 hogares para permitir a las personas optimizar sus gastos.
En Zoox tenemos Smart Pass, un producto que se está utilizando en cadenas hoteleras, tiendas minoristas y otros sectores. A través del reconocimiento facial, el producto genera perfiles de usuarios enriquecidos y se conecta a cientos de aplicaciones para facilitar los procesos, como el registro y la extracción de inteligencia de datos.
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